Reformas a la legislación australiana para hacer frente a la ludopatía
Para intentar acabar con la adicción al juego, el gobierno de Australia ha trabajado en un proyecto de ley para reformar su legislación.
La ley, que entró en vigor a finales del año pasado, ha recibido bastantes críticas, ya que establece que los fabricantes de máquinas tragaperras y de vídeo póker deben instalar en las mismas, para finales de 2014, una tecnología para que los jugadores establezcan la cantidad máxima de dinero que se quieren gastar antes de empezar a jugar.
Para las asociaciones que luchan contra la ludopatía, la reforma es simplemente ineficaz.
Hay por lo menos 200 mil máquinas en el país, utilizadas al menos una vez a la semana por 600 mil personas de los 23 millones de australianos.
La asociación propone que se establezca un límite de un dólar por jugador y apuesta.
Las posibles pérdidas de estas medidas no superarían los 120 dólares por hora.
Teniendo en cuenta que, por el momento, un jugador puede perder 1.500 dólares en apenas una hora, la reforma que proponen estas organizaciones parece que podría tener un impacto mucho mayor en la lucha contra la ludopatía.